El maestro Hernán Casciari siempre merece ser leído. Esta vez nos cuenta cómo le hace para escribir con esa soltura. ¿La clave? Enfocar a un par de personas muy cercanas y diferentes, sólo a dos que conozcamos como la palma de la mano, juntarlas en una mesa imaginaria, y después intentar cautivarlas con una anécdota menor, con un relato elaborado, con una novela, con un cuento corto, con lo que sea.
Vale la pena leer todo el texto y darse una vuelta por el sitio de este chavalo.
domingo, 21 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Entradas (Atom)